El cuero, es una materia prima biodegradable; está expuesto a las condiciones climatológicas, cuando el clima es frío, se mantiene fresco y libre de olores; eventualmente, cuando sube la temperatura, es más susceptible de descomponerse y emitir malos olores a la atmósfera.
Con el fin de preservar su condición natural, es indispensable tratarlo a base de sal de grano; el cuero se extiende completamente por el lado de la carne, y se le agrega la sal en forma esparcida, hasta lograr una capa uniforme. Este proceso sirve para extraer completamente la sangre y líquidos que tiene el cuero en su interior, los cuales, si no son extraídos en forma completa causaran la descomposición y los malos olores. Una vez "Salado" el cuero se mantiene extendido por aproximadamente 24 horas y, al término, es doblado y apilado, listo para entrar a los procesos de curtido.